La Asociación y el Santuario de Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa reciben miles de testimonios cada año en los que miembros de la Asociación cuentan cómo María ha intercedido por ellos. En ese espíritu de gratitud, la Asociación comparte secciones editadas de estos testimonios.
Le comento que mi hermana tuvo que ser llevada al hospital de emergencia un martes por la noche. Los doctores la revisaron y nos dijeron que tenían que hacerle una cirugía de corazón o un trasplante de venas cardíacas. Yo recé con mi hermana y juntas dijimos la oración de sanación y yo le unté aceite bendito de Nuestra Señora. Nos sorprendimos mucho cuando el jueves en la mañana dieron de alta a mi hermana sin necesidad de ninguna cirugía. Considero que esto fue un milagro de intercesión de la Virgen de la Medalla Milagrosa y un testimonio del poder de la fe. —Miembro de California
Yo he sufrido de depresión y ansiedad por muchos años, lo que me causa muchos altibajos. Ahora que llevo puesta una Medalla Milagrosa, siento que las cosas no me preocupan tanto como antes. No me presiono y dejo que Dios decida. Por medio de la sanadora intercesión de Nuestra Señora, siento que las cargas de mi vida se han hecho más livianas. Doy gracias a la Virgen. —Miembro de Massachusetts
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